Más de alguna vez me he sorprendido mirando mi armario y diciendo “no tengo nada que ponerme”, y resulta ser que el armario ya no da más de tanta ropa y con el área de accesorios es la misma cosa, exactamente lo mismo.
Casi nunca uso accesorios, pero cuando los necesito, no encuentro nada que me satisfaga el gusto. Es cierto, una se aburre de llevar los mismos accesorios siempre, por lo que hoy yo abogo por aquellos que son más bien económicos y coloridos. Esto porque así es más fácil variar y no duele tanto tirar a la basura aquellos accesorios que ya están viejos.
Tampoco se pueden dejar completamente afuera los accesorios elaborados en materiales nobles, así que también les sugeriría tenerlos, aunque que no sean éstos la mayoría.
Un tipo de collar que les vendrá bien siempre, son los que están hechos con mostacillas. Hay algunos que llevan varias vueltas, otros con figuritas compactas y otros con hilo elasticado. Todos tienen su encanto y lo bueno de las mostacillas, es que pueden seleccionarse en cualquier color, son brillantes y se ven tan bien como llevar un lujoso collar con piedras preciosas verdaderas, sólo que cargan con un mínimo de peso.
Hay algunas tiendas donde siempre hay accesorios de carey para adornar las muñecas y los brazos, a muy bajo costo. He visto que esos mismos accesorios en una tienda normal de moda, son caros, así que los que estén hechos en esos materiales, vale la pena buscarlos en varias partes.
Para este mes de noviembre, los accesorios básicos tienen que ser: unos aros argolla, pulseras con incrustaciones de piedras grandes y collares de varias vueltas para llevar justo debajo del abrigo. No hay que llevar todo esto junto, sino de uno por vez, ya que la idea es tener un solo accesorio grande a la vista.
Fotos: nymag