Las camisas blancas es un básico que siempre debes tener en tu armario porque nunca pasará de moda. Lo mismo ocurre con los tejanos o con unas deportivas clásicas. Son ciertos elementos de ropa que no te pueden faltar porque puedes usarlos para una sinfín de ocasiones y siempre te quedarán bien.
Es un básico que no te puede faltar
La camisa blanca es un básico que puedes tener de diferentes maneras y que podrás sacar provecho a cada una de ellas. Pueden ser formales o más informales, dependiendo del look que escojas en un momento determinado. Por ejemplo, puedes ponértelas para la oficina, un evento especial o simplemente para salir a una reunión con amigos. Tú eliges el cuándo y el cómo.
Es un básico atemporal que puedes ponerte una y otra vez y que siempre quedará bien, por eso es fundamental que inviertas en aquellas camisas blancas que realmente te gustan y que cuando te las pones te hagan sentir bien contigo misma. Merece la pena gastar un poco más en una de buena calidad.
Existen infinidad de modelos diferentes y solo tendrás que escoger la que consideres que es una opción más acertada para ti. Dependiendo del estilo y del momento, puedes combinarla con diferentes accesorios para darle un look más sofisticado y con mayor personalidad. Es una prenda muy versátil y por eso las opciones son casi infinitas.

Estilos de para tu camisa blanca
Cuando compres una camisa blanca debes tener en cuenta los materiales, cómo te queda en la silueta y por supuesto, el precio. Escoge una que puedas pagar y que además te quede como un guante. Como hay muchos estilos diferentes vamos a contarte los que más se llevan para que cuando vayas a la tienda a comprarla, sepas exactamente qué es lo que quieres.
Clásicas
Las camisas blancas clásicas son aquellas que puedes ponerte siempre que quieras y que quedarán bien tanto para momentos formales como para más informales. Son fáciles para combinar y te quedarán perfectamente tanto con unos vaqueros desgastados y zapatillas que si te la pones con una falda de tubo y zapatos de tacón.
Grandes
No es necesario que tengas una talla XL para disfrutar de una camisa grande ya que se lleva todo lo oversize… es un look más relajado que te quedará muy bien y que si te lo pones con un jersey de punto o de lana encima te quedará espectacular. Incluso la puedes usar en verano si vas a la piscina y la pones encima de tu ropa de baño. Tiene un talle holgado y las combinaciones para disfrutar de esta prenda casi no tienen fin.
Sin cuello
Las camisas normalmente tienen cuello para hacerlas más elegantes, pero también hay versiones sin cuello que son cómodas y que también te quedarán muy bien a tu look. Están inspiradas en la moda masculina pero en realidad la puedes usar siguiendo una moda más minimalista y elegante que puedes usar siempre que quieras.
Cortas
Es posible que tengas en tu mente la típica camisa blanca larga que tienes que remeter por dentro de los pantalones. Pero si te gusta el estilo más corto también existen las camisas blancas cortas. Puedes usarlas con cintura alta o sin ella, pero cuando necesitas una parte de arriba más corta, ésta puede ser tu prenda. Queda igual de bien que cualquier otra camisa blanca pero con una silueta más corta que te facilitará el mostrar la piel de tu abdomen si es lo que desea.

Con tejidos diferentes
Quizá piensas que todas las camisas blancas tienen el mismo tejido, pero nada más lejos de la realidad. Puedes escoger algunas más gruesas y otras que sean más suaves y ligeras como de algodón, lino o satén. Solo escoge el tejido que vaya más acorde con la época del año o simplemente con tus preferencias personales.
Como has podido comprobar, existen muchas posibilidades con el hecho de poder disfrutar de una camisa blanca con la que puedas tener un look más o menos formal. Lo que importa en cualquier caso es que vayas cómoda y que las prendas que escojas te hagan sentir bien contigo misma y con las prendas que tienes en tu armario para poder combinar.