Los cuadros y las rayas, junto con los lunares o los rombos, son los motivos geométricos más incombustibles en el estampado de los tejidos, unos años con más repercusión y otros con menos, es rara la temporada en la que no están presentes en algunas de las prendas de los diversos diseñadores de un modo o de otro. Es imposible librarse de ellos, a algunos les gustan otros los aborrecen, en cierta medida llegan a resultar monótonos, salvo cuando se reinventan con alguna aplicación interesante o algún uso innovador, aunque por otro lado por su clasicismo, son también un acierto seguro para aquell@s que no quieren complicarse la vida.
Las propuestas que vemos en la imagen de este artículo son de 3.1 Philip Lim, se trata de usos de este tipo de elementos geométricos para la decoración de las tela, sobre un formato de vestido moderno y actual, un contraste entre el clasicismo del dibujo, con el vanguardismo de los vestidos, que tienen además un cierto aire retro que impregna en general todo el catálogo, una de las tendencias más interesantes y aceptadas de las últimas temporadas.
Curiosamente y tal vez debido al que se hayan utilizado durante tanto tiempo asociamos este tipo de elementos geométricos con sensaciones y situaciones, los lunares son los más alegres, se identifican con ocio y diversión que puede ser formal o informal dependiendo del colorido y el tamaño, grandes y vivos, sería informal, pequeños y neutros, formal, por otro lado, los rombos se asocian con la seriedad, el jersey de rombos es una prenda tradicionalmente utilizada en el trabajo o en situaciones que requieren responsabilidad, los cuadros son los de uso mas extendido, habituales en camisas y prendas de todo tipo para el día a día y las rayas si son anchas se suelen asociar con el estilo marinero y además se les atribuyen propiedades, como el que si son verticales estilizan la figura, también hay rayas particularmente interesantes como la fina raya diplomática de los trajes de chaqueta que resulta muy elegante.