La pandemia del COVID-19 ha hecho mella en muchos domicilios españoles. La situación de desempleo, o simplemente el hecho de recibir menos ingresos debido a un ERTE, ha provocado que muchas personas no puedan hacerse cargo de los gastos habituales del hogar. Por gastos habituales entendemos la factura de la luz, el agua, la compra… Por eso hemos querido elaborar un artículo en el que demostramos que, con pequeños gestos, podrás ahorrar mucho en tu economía doméstica, y encima no cuesta nada.
Ahorrar en electricidad
Sin duda, la iluminación abarca un gran porcentaje del consumo eléctrico de la casa. Una manera simple de ahorrar en este sentido es mediante la instalación de LEDs. Este tipo de tecnología gasta mucho menos electricidad y cuenta con las mismas prestaciones que las bombillas normales. Además, podrás poner bombillas LEDs donde desees, ya sea en focos empotrables, como en lámparas, flexos…
Por otro lado, valora si cambiarte a una tarifa con discriminación horaria, sobre todo si haces más vida en tu domicilio por la noche. Así, podrás aprovechar para poner los principales electrodomésticos a esas horas. Es decir, el lavavajillas, la lavadora, el termo, el horno… Te llevarás una sorpresa para bien cuando recibas la factura.
Ojo, desconecta aquellos aparatos que no utilices. Esto es algo de lo que todo el mundo pasa y es más importante de lo que creemos. Ahorrarás entre un 7% y un 10% de tu consumo eléctrico.
Ahorrar en agua
En primer lugar, no te bañes y dúchate.
Ahora que ya nos hemos quitado el gran clásico, vamos a ver otras formas de ahorrar agua. Una que utilizo personalmente es la de llevarme un cubo a la ducha. Y es que desperdiciamos un montón de agua esperando a que salga el agua caliente. Una manera de aprovecharla es almacenando dicha agua en un cubo. Después podemos utilizarla, por ejemplo, para regar las plantas.
Por supuesto, cierra el grifo mientras te afeites o te laves los dientes. Y si instalas un difusor en la alcachofa de la ducha que te permita optimizar el agua, mejor que mejor.
Ahorrar en la compra
En primer lugar, elabora una lista con exclusivamente lo necesario. Muchas veces nos dejamos llevar y terminamos comprando artículos totalmente prescindibles. Y por supuesto, evita ir con hambre a las tiendas. Esto que parece un gran tópico, es una verdad como un templo. El hambre decidirá por ti y comprarás más comida de la que necesitas.
Por último, revisa muy bien qué tiendas vas a visitar. Es decir, no seas fijo de una tienda y revisa todas las ofertas que te pueden ofrecer las demás. Mira los catálogos, saca la calculadora y sobre todo, compara. Y en la medida de lo posible, apuesta por la marca blanca. Este tipo de productos, en muchas ocasiones, provienen de las mismas fábricas de las marcas punteras.
Y hasta aquí nuestro artículo sobre el ahorro doméstico. Esperamos haberte dado algunas ideas a la hora de optimizar tu gasto en electricidad, agua y en la compra.