Se nos acaba el año y nos hemos puesto a recopilar los acontecimientos que han redefinido la moda en 2017. ¡Revísalos con nosotros!
El fin de año suele ponernos reflexivos. Parece ser que cuanto más se acerca el año nuevo, más vueltas le damos a lo que ha pasado el año corriente. Nos preguntamos: ¿qué ha pasado este año? Hacemos balance.
Más allá del importante balance personal que haga cada uno del año, en este artículo hemos querido revisar algunos de los acontecimientos que han marcado la moda en 2017. Un año que muchas publicaciones de moda han definido como ¨el año de las reivindicaciones¨.
¿Por qué? Este año la industria de la moda ha dado un importante giro hacia la transparencia. Desde el escándalo desatado entorno a Harvey Weinstein –gracias al cual la industria rompió su silencio y se unió a la lucha contra los abusos sexuales– hasta el establecimiento de un nuevo estatuto de trabajo para las modelos por parte de los dos mayores conglomerados, el mundo de la moda ha cambiado drástica e irrevocablemente en los últimos 12 meses.
Voz levantada contra los abusos
Lo único bueno, y queremos darle enfoque positivo, de que estos abusos hayan salido a la luz es que -creemos- marcará un antes y un después para muchas personas. Hombres y mujeres que creían haber estado ante ¨situaciones normales¨, probablemente comenzarán a identificar mejor el abuso y a denunciarlo. Esto, sin duda, es un paso hacia adelante en la moda 2017 y en el mundo.
Cuando en octubre salió a la luz el presunto historial de acosos y agresiones sexuales perpetrados por Harvey Weinstein, la industria de la moda, con figuras como la modelo Cara Delevingne o el diseñador Tom Ford, alzó su voz contra el exproductor cinematográfico, además muy vinculado a la moda a través de iniciativas como Project Runway.
Catalizador del debate social, el suceso instó a importantes miembros de la industria, tales como la modelo Edie Campbell, a firmar un manifiesto en contra de las irregularidades de carácter sexual en la industria; mientras que otros rostros, como la modelo Cameron Russell, siguieron compartiendo en las redes sociales sus propias vivencias de abuso.
Menos pieles
¿Pasará la piel a mejor vida? Este año, tanto Gucci, perteneciente al conglomerado de lujo Kering, como Yoox Net-A-Porter, el influyente grupo responsable de Net-A-Porter, se comprometieron a convertir sus negocios en libres de pieles. Se unieron así a una larga lista de diseñadores ‘antipiel’ entre los que se incluyen Calvin Klein, Tommy Hilfiger, Stella McCartney, Ralph Lauren y Giorgio Armani. Aunque las voces en contra no paran de crecer, las pieles siguen gozando de mucha popularidad, tanto que su venta global se ha casi triplicado desde 2011, según datos aportados por la International Fur Federation.
Este podría ser un paso hacia adelante para un mundo más amigable y respetuoso del medio ambiente. El pelo está de moda, sí, pero apostemos todos por la piel falsa.
Mejores condiciones de trabajo para modelos
En febrero de este año, el influyente agente de casting James Scully destapó, a través de un sentido post en Instagram, el maltrato por parte de la industria al que se ven sometidas muchas veces las modelos, relatando como en el desfile de Balenciaga las modelos fueron obligadas a esperar durante horas enclaustradas en una oscura escalera. El comentario suscitó muchas reacciones de apoyo de colegas como Helena Christensen o Antoine Arnault, directivo de LVMH e hijo de Bernard Arnault, que pidió a Scully que en caso de observar cualquier comportamiento inaceptable en nombre de su familia, se lo revelara inmediatamente.
El pasado septiembre, los conglomerados de moda LVMH y Kering elaboraron conjuntamente un estatuto que protegiera el bienestar de las modelos y les asegurara unas condiciones de trabajo dignas. Dicha acta establece que las marcas deben contar con un terapeuta especializado durante las horas de trabajo y prohíbe contratar a modelos menores de 16 años.
Alzando la voz
No cabe duda de que la moda se ha vuelto más política en 2017. En enero, millones de personas se manifestaban en todo el mundo contra la reciente investidura del presidente de EE.UU. Donald Trump, y la moda fue enseguida a la zaga de mano de diseñadores como Humberto Leon, Tom Ford y Marc Jacobs, que rechazaron contundentemente vestir a Melania Trump; o Missoni, que subió los famosos pussyhats a la pasarela convirtiéndola así en foro de debate político.
Esperemos que cada pequeño paso en la moda 2017 se manifieste en una industria respetada y con mucho que decir y aportar en el mundo.
Más diversidad
La falta de diversidad en las pasarelas es sin duda uno de los defectos más flagrantes de la industria. Afortunadamente, el pasado mes de la moda se preció de ser el más inclusivo de la historia, y la diversidad racial se hizo notar en sus cuatro grandes semanas.
En Nueva York, la mejor valorada en este aspecto, alrededor de un 40% de las modelos eran no caucásicas, según datos de The Fashion Spot, además de incluir una cantidad significativa de modelos transexuales o de género no binario así como otras tallas grandes o con discapacidad, enriqueciendo así sus pasarelas. A pesar de estos grandes avances en la Gran Manzana, las ciudades europeas aún se hallan muy lejos de este objetivo, sobre todo Milán, donde solo un cuarto de las modelos eran de raza no blanca.
Nuevos directores creativos en Givenchy, Lanvin y Chloé
La pasada temporada, Natacha Ramsay-Levi, una veterana en la industria que trabajó más de una década bajo el ala de Nicolas Ghesquière, asumió el cetro Chloé dispuesta a transformar la firma parisina a través de sus trajes de pana masculinizados y abrigos de cuero; pero sin desmerecer el legado histórico de la casa, reinterpretando sus característicos motivos ecuestres y estampados florales.
En los últimos 12 meses, en la industria de la moda ha seguido girando el juego de las sillas, y como consecuencia varios diseñadores de perfil alto han tomado la puerta de salida: Riccardo Tisci dejó Givenchy tras 12 años como director; Clare Waight Keller salió de Chloé después de seis años para reemplazar a Tisci; Bouchra Jarrar se fue de Lanvin tras apenas 16 meses en el puesto; y Christopher Bailey anunció su intención de dejar Burberry el año que viene, después de 17 años. Las firmas de lujo históricas afrontan un periodo de constante reinvención y aquellas trayectorias de décadas de duración parecen ser ya cosa del pasado.
Crecimiento online
A pesar de que las cifras de consumo de moda 2017 en España no son del todo alentadoras. Cuando se trata de la compra online, España se sitúa entre los países que mejor han incorporado este servicio de venta, en el cuarto lugar del ranking con un 34%, después de Alemania (39%), Reino Unido e Italia (37%). Además, los smartphones se perfilan como los preferidos para compras de ropa (en el caso de las mujeres).
Esperemos que 2018 sea un año de mayor inclusión, menos abusos; una industria más diversa, justa; crecimiento; y mucho más que decir y aportar al mundo en el que vivimos hoy.