Probablemente ha sido uno de los diseñadores de moda más importantes del siglo XX, y el fundador de una de las marcas de ropa más relevantes de alta costura: Yves Saint Laurent, fallecido ayer en París y todo el mundo de la moda llora su ausencia hoy.
Fue uno de los principales responsables de devolver un cierto poder a las mujeres al crear para ellas un vestuario contemporáneo, y por democratizar el pret-a-porter siempre pensando en la comodidad y la liberación de la mujer moderna. Nadie mejor que él para vestir el cuerpo femenino con un smoking, desde luego.
Catherine Deneuve, expléndida representante y modelo indiscutible de sus diseños y lineas más vanguardistas, siempre ha sido el fiel reflejo de la mujer que él veía en sus diseños, sus sueños de elegancia y liberación personal materializados en sus líneas femeninas.
Ha sido uno de los personajes que más ha influído en la moda internacional, uno de los que más barreras estéticas y morales ha cruzado, un artista que ha expuesto su obra en los mejores museos del mundo y ha cosechado tantos éxitos que sólo enumerarlos le entra a uno vértigo.
